REFLEXIONES EN JORNADA DEL MIAMSI DEL 25 DE JUNIO

¿Estamos viviendo el Evangelio y de esta manera aportando en la construcción de una sociedad peruana donde se respete y se promocione al Ser Humano?

Siguiendo las enseñanzas de Cristo debemos ir más allá del simple contacto con las personas que nos rodean, profundizar más en sus necesidades.Vemos mucha pobreza y hay que tomar conciencia de nuestro entorno, aprender cada día a ver al próximo con ojos de discípulos de Cristo y por sobretodo no perder la esperanza, es más, nos toca como miembros del MIAMSI infundir esperanza.

Para vivir los valores, primero debemos conocerlos y asumir el compromiso de: Respeto a lo que realmente lo merece; Tolerancia en las cosas tolerables; Solidaridad con los que trabajan para el bien común contra las injusticias y la pobreza; Dialogo con todos.
Si queremos ser discípulos y apóstoles y como seguidores de Cristo debemos tener la disponibilidad del discípulo. El Evangelio no nos invita a huir del mundo sino a meternos en él, siguiendo el ejemplo de Cristo, la Encarnación es para todos los Seres Humanos. “Ustedes son la sal de la tierra, la luz del mundo…”, misión grande. “Vayan por el mundo y sean testigos de la Buena Noticia y brille su luz delante de los hombres…”
Hay que tomar conciencia de lo que nuestra fe cristiana nos va a exigir y si lo hacemos en comunidad mucho mejor. “El Perú no nos puede ser indiferente, el mundo no nos puede ser indiferente” Manuel Diaz Mateos SJ.

De acuerdo a esta reflexión ¿A qué acción concreta me comprometo que resalte los valores de respeto, tolerancia, solidaridad y diálogo ?

Hemos tratado de vivir el Evangelio en esta reciente etapa electoral, pero nos hemos preguntado ¿las personas a las que no les ha llegado los beneficios de la creciente economía piensa y siente igual que nosotros?, quizás debemos escucharlos con mayor atención, ese es nuestro desafío. Nuestro compromiso es tener mas diálogo con las personas cercanas, acercarnos y atender con amor a los mas débiles, darles mejor trato a todos los que están cerca a nosotros.

Lo que hemos dicho es valioso, pero lo mas importante es tratar de vivirlo. Como MIAMSI debemos tomar conciencia y preguntarnos ¿dónde estamos?; estamos en el Perú y es nuestra responsabilidad construirlo entre todos. Vemos que la economía crece pero la pobreza se agranda, juntos podemos construir este país, no olvidarnos que todo lo que sucede no está al margen del MIAMSI o de la religión. Cuando habla el pueblo hay que aprender a escucharlo. Todos somos responsables de las contradicciones que existen, no podemos olvidarnos del 30% de pobreza que hay, recordarlo y situarnos en esta realidad.
Esto nos afecta, seamos o no cristianos, es un tema humano o inhumano, se trata de derechos humanos, pobreza y marginación. Es nuestra tarea vivir nuestra fe con coherencia, es tarea nuestra construir un Perú más justo. ¿Qué me dice el Señor ahora? Dialogar, escucharnos, respetarnos, devolver la credibilidad y la confianza mirando al país, mirarlo como Dios lo mira, “solo se ve bien con el corazón”, toda una tarea cristiana... Manuel Diaz Mateos SJ.
FELICES FIESTAS PATRIAS

CONTRA EL INMOVILISMO Y LA RIGIDEZ MENTAL

El seguimiento es movimiento y libertad, pero lo que estamos viendo es que el discípulo no se mueve porque hay demasiadas cosas que le paralizan: la insensibilidad, el corazón atado al poder o a la riqueza, la autosuficiencia farisaica, el legalismo y el ritualismo que dejan la peligrosa apariencia de ser perfectos cumplidores de leyes pero no testigos del amor de Dios. Pueden darse todas esas cosas y el ser humano puede sentirse orgulloso de sus logros, pero, según Jesús, el corazón no está con Dios.

Aunque el Evangelio exige conversión y cambio permanente, esfuerzo por asimilar unos valores y unas actitudes a las que nos resitimos, y es el camino abierto que Jesús va marcando, todos nosotros preferimos la seguridad de lo conocido y trillado que la aventura de lo nuevo y esperanzador. Jesús nos llama a movernos en clima de libertad y nosotros nos instalamos en nuestras rutinas, en nuestros intereses, en nuestras seguridades. Pero esto no es otra cosa que el pesimismo fundamental de los que piensan que "todo tiempo pasado fue mejor", o es la gran tentación que siempre tenemos de disfrazar de fidelidad todos nuestros fundamentalismos, fanatismos o tradicionalismos pero que son sólo búsqueda de seguridad, "salvar la vida". Seguirle a Él por lo contrario, es aceptar el riesgo de la inseguridad como precio de la libertad y de la confianza plena en Dios.

El que sigue mirando atrás no vale para el Reino (Lc 9,62)

Manuel Díaz mateos.